30 de enero de 2013

EL WINDOWS 8 NO CONVENCE

Windows 8 crece el triple de lento que su versión previa, con el 1,7% de cuota





Las nuevas versiones de los sistemas operativos de Microsoft están a punto de cumplir los primeros cien días en el mercado y los resultados comerciales hablan por sí solos: Windows 8, diseñado para ordenadores personales y portátiles, apenas dispone de una cuota de mercado mundial del 1,72%, mientras que el Windows Phone, para smartphones y tabletas, sólo dispone de una participación del 1,05%. Los datos los ha hecho públicos la firma NetMarketShare y corresponden a finales de diciembre de 2012 con información recabada de 40.000 sitios web de todo el mundo.

La gran apuesta de Microsoft en el ámbito de la informática de consumo, Windows 8, tampoco sale favorecida en las comparaciones con otros lanzamientos similares de la corporación. En sólo los dos primeros meses de comercialización, la presencia de Windows 8 en el parque instalado es un 11% menor que el que obtuvo Windows Vista en su momento. Como es conocido por la industria, el Vista ha pasado a la reciente historia de la informática como una de las plataformas más calamitosas debido a sus numerosas y constantes correcciones y parches. Ante semejante contrariedad, Microsoft aceleró la migración de Windows Vista por Windows 7, sistema que en los dos primeros meses de su lanzamiento superó el 6% de cuota de mercado, lo que viene a ser 3,5 veces más que la evolución de Windows 8 en el mismo periodo de tiempo.

El reparto actual de sistemas operativos para ordenadores, dominado mundialmente por Windows con el 91,7% del total, está liderado por Windows 7, con el 45,11%, seguido de Windows XP, con el 39,08%, y Vista, con el 5,67%. Las versiones Mac OS X (10.8 y 10.6) suman el 4,34% mientras que los distintos entornos Linux alcanzan el 2,08%. El 1,72% restante corresponde a Windows 8.



Usuarios arrepentidos

Los pequeños comercios especializados en informática consultados por elEconomista comienzan a practicar el denominado downgrade, tendencia que también ha surgido en los Estados Unidos, con tiendas que ofrecen a los usuarios desinstalar el Windows 8 para recuperar el Windows 7, según informa el portal online El Confidencial. El precio en España de cambiar el nuevo sistema operativo de Microsoft por el inmediatamente anterior ronda los 50 euros, sin incluir el coste de la licencia previa de Windows 7 (100 euros más) y sin migrar los datos (otros 25 euros).

El principal motivo de rechazo de los usuarios, según las fuentes consultadas, son los problemas de manejabilidad de un sistema diseñado para pantallas táctiles y no para pantallas convencionales, que conforman la práctica totalidad del parque instalado de PC.

Los analistas sondeados por este periódico también apuntan que los consumidores muestran rechazo a tener que aprender un nuevo entorno para interactuar con el ordenador, sin aprovechar la experiencia de usuario tradicional. En buena parte ese hecho explica el éxito de las descargas del programa gratuito Start 8, que ofrece un interfaz del Windows 8 algo parecido al de Windows 7, más familiar.

Los fallos de seguridad de Windows 8 también son un lastre de todo aquello que lleve el sello de Microsoft. Según la firma BitDefender, el nuevo Windows 8 es vulnerable ante el 15% de los malware existentes. Los errores corporativos tampoco ayudaron al nuevo sistema operativo, como la célebre filtración de las claves para piratear Windows 8 por parte de la propia compañía.

Los anteriores problemas han influido de alguna forma en las cuentas de Microsoft del último trimestre del año, cuyos beneficios cayeron el 3,7%. No obstante, fuentes de Microsoft se mostraron ufanas por la cifra de ventas de Windows 8 cosechada hasta la fecha, de 60 millones de licencias, si bien la mayor parte de ellas fueron comercializadas antes del lanzamiento del sistema operativo a través del renovado stock de los fabricantes.

Por lo pronto, Microsoft ha encontrado los primeros culpables para el fracaso inicial de Windows 8: los vendedores de ordenadores. Según publica la revista especializada The Register, el gigante de Redmond argumenta que el canal de distribución no ha sabido recomendar a los consumidores el hardware adecuado para Windows 8, al sugerir equipos sin pantalla táctil.

Asimismo, al contrario que con otros sistemas operativos, el nuevo software de Microsoft no ha dinamizado la industria informática, como era tradición. De hecho, las ventas de estos equipos cayeron el año pasado el 7,8% respecto al año anterior, con 325 millones de PC y portátiles.

En el segmento de smartphones, las cuentas del Windows Phone tampoco son halagüeñas para Microsoft. La cuota de mercado en los dos primeros meses alcanzó el 1,05%, muy lejos de los líderes iOS (60,1%) y Android (24,6%), pero también de Java ME (10,1%) y por detrás de BlackBerry y Symbian

Fuente:El Economista

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